RCP: Reanimación cardiopulmonar
Cuando se produce un paro cardiorespiratorio, la respiración y circulación se detienen. Si recibe asistencia con la técnica de reanimación cardiopulmonar (RCP), la persona tiene posibilidades de recuperarse y no presentar secuelas.
La RCP tradicionalmente consistía en realizar respiración boca a boca intercalando compresiones torácicas. Actualmente se centra más en las compresiones torácicas y se reduce al mínimo o elimina la respiración boca a boca. De esta manera, la técnica es más sencilla y supone interrumpir menos la circulación de la sangre.
Pasos de la RCP
Para ayudar a una eventual víctima de un paro cardiorespiratorio se deben llevar a cabo los siguientes pasos, denominados "cadena de vida":
1) Descartar la existencia de algún riesgo evidente al acercarse a la víctima (choque eléctrico, intoxicación por gases, vehículos circulando, violencia, etc.) En el caso de existir, se debe esperar a que actúe personal especializado sobre el peligro.
2) Evaluar el estado de conciencia de la víctima. Tomar a la persona de los hombros y con una leve sacudida mirar si respira normalmente y preguntarle en voz alta: ¿Me escucha? ¿Qué le pasa?.
3) Llamar al número de emergencias médicas local, para pedir una ambulancia o solicitar ayuda a la policía. Averiguar si el lugar cuenta con un desfibrilador externo automático (DEA).
4) Comenzar con las maniobras básicas de RCP:
- La víctima debe estar boca arriba y sobre una superficie dura (piso o tabla) e iniciar de inmediato las maniobras de compresión.
- Para realizar las maniobras de compresión: colocar el talón de una mano y luego la otra mano encima, entrelazando los dedos, en el centro del esternón, entre los pezones. Si se cuenta con el DEA utilizarlo desde este momento.
- Adoptar una postura erguida, los hombros deben estar alineados encima del esterón de la víctima; con las manos aplicar presión cargando el peso del cuerpo sobre los brazos rectos de manera que el esternón baje 5 cms.
- Realizar compresiones a un ritmo rápido y sostenido (mínimo de 100 por minuto) hasta que llegue la asistencia médica.
Enfermedades cardiovasculares
Las enfermedades cardiovasculares representan la principal causa de muerte en nuestro país, explicando en 2011 el 33% del total de las muertes (236 muertes cada 100.000 habitantes), y 13% de los años de vida potencialmente perdidos. En Argentina, el Infarto Agudo de Miocardio (IAM) produce anualmente 15.272 muertes (2011), de las cuales 5.606 se producen en personas menores de 70 años. El paro cardiorespiratorio es responsable de más del 60% de las muertes de adultos por enfermedad coronaria.
Mini Guía RCP (PDF)
Fuente:
Ministerio de Salud de la Nación, RCP: Reanimación cardiopulmonar, disponible en http://www.msal.gob.ar/rcp